La comunicación con las familias tiene la finalidad de mejorar el cuidado y el aprendizaje de los niños/as. Una falta de comunicación, un exceso de la misma o un marco inapropiado atentan contra dicha finalidad. La relación entre comunicación, cuidado y aprendizaje está consignada en el Reglamento Escolar para las escuelas del GCABA.
La comunicación puede partir de una necesidad de los docentes o de una necesidad de las familias.
Como la mayoría de las prácticas escolares debe entenderse flexiblemente en su contexto, pero como reglas generales podemos decir:
1- Se entiende que el momento de la salida sea muy conveniente a las familias para conversar con los docentes, pero en ese momento los docentes tienen la obligación de cuidar a los alumnos, y terminada esa obligación tienen el derecho de retirarse. Una brevísima comunicación de 10 segundos no puede negarse, pero para más debe hacerse una cita.
2- Teniendo en cuenta lo antedicho, queda prohibido hablar con los responsables de los alumnos cuando se está entregando alumnos a la salida o lo mismo cuando el docente tiene alguna otra obligación referida a los alumnos.
3- Cuando las familias quieran comunicarse con los docentes lo pueden hacer a través del cuaderno de comunicaciones. Si desean comunicarse con la Conducción de la Escuela pueden hacerlo al correo de Secretaría, o si es urgente por teléfono.
4- Cuando el docente quiere comunicarse con la familia de un alumno puede usar el cuaderno de comunicaciones o el correo electrónico.
5- Para conversaciones sobre problemas con alumnos debe siempre organizarse una entrevista, con otro docente, registrándose en el libro de Actas del grado.
5.1- Cada grado tendrá su libro de Actas que irá pasando de año en año. Las entrevistas significativas se guardarán en fotocopia firmada por Dirección en el legajo del alumno. Si el Acta se hace en otro libro de la Escuela se pegará fotocopia autenticada en el libro del grado. El libro de 7mo del año anterior pasará a archivo.
5.2- En la fecha y hora de la cita se debe tener en cuenta:
1ro: la obligación del docente de atender a los alumnos.
2do: las dificultades de horario de los responsables del alumno.
3ro: la conveniencia laboral del docente.
6- Cualquier situación relevante sobre el alumno, el docente que corresponda debe comunicarla a la familia en el día de la ocurrencia, por medio del cuaderno, por teléfono, por correo oficial, o mencionarla a la salida con una citación. Se debe comunicar: accidentes, pérdidas, inconductas graves o reiteradas, situaciones de convivencia graves o reiteradas.
7- Los responsables de los alumnos tienen la obligación de:
7.1- tener, durante la jornada escolar, encendidos y habilitados los teléfonos declarados en la ficha de datos del alumno.
7.2- Asistir a las citaciones urgentes, y a las no urgentes asistir u ofrecer la fecha y horario más próximo posible. Esta obligación está consignada en la Ley Nacional de Educación.
7.3- Revisar diariamente los cuadernos de comunicaciones y su correo declarado.
7.4- Informar de inmediato cualquier cambio en los datos de contacto.
7.5- Mantener actualizado el legajo del alumno con documentación, vacunas, tratamientos, afecciones del alumno, situaciones legales.
8- Cualquier falta de respeto en la comunicación que no se reconozca y subsane de inmediato suspenderá de por sí el diálogo, el cual se retomará con alguna mediación superior. Si bien el respeto debe ser mutuo en cuanto personas, el responsable del alumno respetará, además, la función docente, y el docente la función del responsable del alumno.
9- Nunca se comunicará en voz alta delante de otras familias o docentes no involucrados cualquier cosa que pueda afectar a la fama del alumno. Tampoco los responsables de los alumnos harán en voz alta una crítica a cualquier docente o a la Escuela en general en presencia de los alumnos o de otras familias no involucradas en la comunicación. Tenemos que cuidar a los alumnos y la confianza que es el fundamento del aprendizaje para ellos. Si bien todos tenemos derecho a opinar, es perjudicial a los alumnos conocer las opiniones de los adultos que no pueden asimilar críticamente si éstas deterioran la confianza del niño/a en sí mismo/a, y le suman dudas sobre la conducta a seguir o su seguridad. Hay comunicaciones que sólo deben darse entre los adultos involucrados preservando la fama de los demás.
10- La OEA quiere ser una Escuela abierta, de comunicación fluída, pero este ideal solamente es concretable sobre la base del respeto de las funciones, la profesionalidad y la eficacia, que impliquen como nota especial el afecto que debe unir a los que aman a los alumnos/as y buscan en conjunto su bien superior.