Como dijimos en el EMI del 30 de septiembre, como punto de partida práctico para mejorar la convivencia, trabajaremos el orden en las clases. Valen estas analogías: Si vamos de excursión y los alumnos no se quieren abrochar el cinturón el micro no arranca. Si vamos en auto con nuestra familia y uno de nuestros hijos abre la puerta del coche no seguimos andando, porque cuidamos a nuestros hijos, y porque el viaje no se completaría con todos sanos y salvos. De la misma manera, la clase no puede darse en medio del desorden: se habla de a uno, se paran de a uno si es necesario, cada uno cuida su lugar y no invade el lugar de otros. Entonces el docente puede enseñar, el alumno/a aprender, pueden intercambiar, todo es transparente y no se pierden las cosas. Por el contrario, en el barullo y con alumnos parados se ocasionan los maltratos verbales, se provocan conflictos, golpes, o pérdidas de objetos personales. Esto debe ser motivo de Consejo de Aula, quedar por escrito con el compromiso de todos, es un aprendizaje de ciudadanía y derechos obligatorio, más importante que cualquier otro contenido de PL, Matemática u otra materia. ESI y CONVIVENCIA son y deben ser contenidos prioritarios. Y deben constar en los cuadernos y carpetas de todas las materias, también las curriculares: Educación Física, Plástica, Música, etc.
Renovar la propuesta didáctica y hacerla interesante para los alumnos también contribuye a la mejora de la convivencia. En este sentido, y más allá de lo que cada docente pueda hacer en sus clases, ya solicitamos para el año que viene los Programas de Teatro en la Escuela, Ajedrez y Radio.
Si el docente ve que los alumnos están cansados, para el coche, bajamos del auto, estiramos las piernas, pero en orden también, no sale cada uno por su cuenta cuando quiere o donde quiere.
Fuera del aula se acompaña también la práctica y los emergentes. En los momentos de descanso lógicamente los alumnos tienen más autonomía y se autoorganizan. Es allí cuando el acompañamiento de los docentes puede verificar las prácticas de convivencia que los alumnos han interiorizado y tomarlas como material de reflexión y compromiso. Pero debe haber una norma trabajada previa a una transgresión. La transgresión debe ser reflexionada, asumida, reparada en forma concreta y gradual. Siempre hay una responsabilidad individual y otra grupal, develar la complicidad de los que miran la escena. Se debe registrar los compromisos en el cuaderno de convivencia del grado. Y sí, para eso hay que postergar la clase de matemática, de música, de inglés, parar el micro, pero se está aprendiendo convivencia y ciudadanía, estamos abrochando cinturones, estamos cerrando las puertas del coche para poder llegar a destino sanos y salvos todos, es una acción inclusiva. Y en el micro con los cinturones abrochados iremos cantando, con las puertas cerradas del coche iremos imaginando, jugando, pero todos a salvo, con nuestros derechos intactos.
Es difícil si esta tarea la realizo solo/a y me la propongo a corto plazo. Será fácil si la llevamos adelante con los alumnos, las familias y los demás compañeros docentes a mediano plazo, con paciencia, cohesión y perseverancia. Todos los docentes cuidamos los derechos contenidos en las normas, los señalamos en todos los ámbitos de la vida escolar: aula, recreos, ed física, comedor, ingresos, salidas, entrevistas con padres, etc.
Las familias deben participar, hablando en casa, informando a los docentes, cumpliendo las normas que la Escuela dispone para la organización escolar, dirigiéndose con respeto al personal de la escuela, tratándose bien en los medios de comunicación informales que establezcan entre ellas..
Los Consejos de Aula se realizarán cada 15 días aproximadamente o cuando se vea necesario. Las transgresiones a las normas de convivencia se registrarán con el compromiso del alumno en el libro del Aula. La 3ra transgresión a una norma la registrará el propio alumno en el libro de la Dirección con su correspondiente reparación. A la cuarta transgresión se realizará un registro con la familia del alumno y otro compromiso, sin perjuicio de que se le haya comunicado antes a las familias o desde el principio si el caso lo requiere. De este modo se respeta la gradualidad y la responsabilidad.
Como marco de esto vamos a inaugurar EL CONSEJO ESCOLAR DE CONVIVENCIA, con representantes de los alumnos de cada grado, docentes, auxiliares y familias. Este Consejo permitirá dar participación, recoger las propuestas de todos, generar un mayor compromiso, aumentar la creatividad en las estrategias, y fortalecer las Autoridades.
Las dificultades de convivencia de alumnos que excedan estas intervenciones deben tratarse individualmente: el docente de grado realiza un informe con el aporte de los curriculares, y la Coordinación de Ciclo acompaña a este alumno/a durante la jornada escolar, se piensan estrategias específicas, se lo deriva al Equipo de Orientación Escolar, comienza el tratamiento que indiquen los profesionales de la salud, se lo puede cambiar de sección, de modalidad, reducirle la jornada, sacarlo del aula para que trabaje en otras condiciones, se puede evaluar un cambio de escuela, etc, siempre en acuerdo con el Equipo de Orientación Escolar y la Supervisión, en diálogo permanente con la familia y respetando las urgencias del caso y los tiempos necesarios para que se produzca el aprendizaje de la nueva conducta.
Las dificultades de convivencia individuales se entrelazan siempre con las de un grupo: familia, grupo clase, escuela. Para abordar dificultades grupales convocamos al EOE y al Programa de Vínculos Saludables. Ellos ya están trabajando con nosotros.
El ejemplo de los padres, madres, docentes y alumnos es fundamental. Nada motiva más al cambio de conducta que el ejemplo, el afecto y el diálogo. No puede cambiar la Escuela si no cambian las familias, los docentes, los auxiliares, los alumnos, todos. Implementaremos un proyecto de alumnos/as tutores, para que los más grandes de la escuela acompañen los procesos de convivencia de los más chicos. También formaremos un equipo promotor de la convivencia en la Escuela y un espacio para los exalumnos de la escuela, cuya posta se la daremos a nuestros actuales alumnos de 7mo grado y sus familias.
Todos ganamos. Cerremos las puertas del coche, abrochemos los cinturones, y arranquemos el último tramo de este viaje 2021. El año que viene seguiremos construyendo este proyecto de convivencia entre todos, lo mejoraremos y cosecharemos los frutos de un trabajo serio, planificado, por nuestros alumnos y alumnas.
Mariano
Director